Francisca López Pérez, de Momostenango, Totonicapán, fue violada por un vendedor de caramelos al que no ha podido identificar. Como consecuencia de esta agresión se quedó embarazada de trillizos, según informa Univisión.

La menor, que no supo que estaba embarazada hasta que vio los cambios en su cuerpo, dio a luz el pasado mayo, pero tanto ella como sus hijos sufrían desnutrición. Los neonatos pesaron cerca de un kilo y dos de ellos fueron trasladados de urgencia a un hospital de la zona, sin embargo, 25 días después fallecieron.

Tras el parto, la menor y el superviviente de los trillizos viven en medio de una desgarradora pobreza, complicada aún más porque el pequeño necesita oxígeno y debe ser llevado constantemente al hospital.

La menor vive con su madre y otros siete hermanos en una casa construida con tablas y láminas, según informa el Observatorio en Salud Sexual y Reproductiva de Guatemala (Osar). El Osar dio a conocer que de enero a julio de 2018 se reportaron 59. 584 embarazos en adolescentes de 15 a 19 años. En el mismo periodo se reportaron 2.102 casos en niñas de 10 a 14 años.

El caso de Francisca muestra una cruel realidad en el país centroamericano, donde se suceden otros como el de Estefany Cux, de 13, que fue violada por su padrastro, de 38, quien se dio a la fuga al conocer que estaba embarazada.

El bebé de Cux nació con sífilis congénita y sufre desnutrición. Las probabilidades de vida son mínimas, según la información a la que tuvo acceso el Osar.